Es uno de los platos más conocidos –y consumidos– de la gastronomía asturiana. La fabada se puede encontrar en los menús y cartas de centenares de restaurantes más allá de Asturias, siendo todo un baluarte de la buena gastronomía, el buen «yantar» y con productos que nos trasladan al corazón del Principado. Pero, ¿cómo conseguir el sabor y textura de la fabada de antaño? ¿Cómo hacer una auténtica fabada de campeonato?
Os desvelamos tres trucos que no pueden faltar si quieres una fabada llena de sabor y cargada de tradición.
1. Sal en su justa medida y sin usar utensilios de cocina
Cuando vamos a realizar un guiso con alubias u otro tipo de legumbres es habitual que sazonemos el agua de cocción una vez ha roto a hervir. En este caso, la fabada asturiana no requiere que se añada sal durante el proceso de cocción ya que podemos tener un resultado muy desagradable, con un intenso toque salino que mataría el sabor del resto de ingredientes.
Tampoco se debe utilizar una espumadera –ni siquiera de madera–, ya que rompería el caldo y podría destrozar la faba.
2. Compango de calidad para dar un sabor único
¿Echas de menos el sabor de las fabadas de antaño? ¿Aquel aroma que inundaba la cocina de nuestras abuelas y que parece perdido?
Un compango de calidad, con su chorizo, morcilla y tocino asturiano, es clave para rememorar aquellas fabadas llenas de sabor y tradición. En los supermercados es posible encontrar compangos listos para usar pero en la mayoría de las ocasiones cuentan con procesos de elaboración industriales, donde se pierde ese ápice de tradición –y sabor– que identifica una buena fabada.
Nuestro compango, elaborado siguiendo la receta familiar desde hace más de cincuenta años, nace en el corazón de Piloña. Una tierra donde el embutido cura con el aire fresco de la mañana y se ahuma con las mejores maderas que nos regala nuestro entorno. Solo así, conseguimos ese auténtico sabor que nos distingue. Como siempre.
3. Faba de calidad, que requiera tiempo
Hoy en día, es posible preparar una fabada tradicional en pocas horas. El uso de ollas exprés y similares permite ganar tiempo a los cocineros más amateurs. En cambio, nuestra recomendación, es que la cocina tradicional lleva tiempo. Los guisos no pueden saturarse en pocos minutos, aún contando con ingredientes de gran calidad como el compango de Embutidos Jesús Pérez.
Por eso, a nuestros packs de compangos se le unen los packs de preparados de fabada. Con faba asturiana seleccionada una a una, son ideales para quienes buscan los mejores ingredientes del mercado con una perfecta relación calidad-precio.
Dicha faba ha de remojarse durante al menos doce horas –toda una noche, por ejemplo–, haciendo que su textura mantecosa ligue a la perfección con la grasa de calidad de nuestros embutidos.
¿Cómo saber si es de calidad? La fabada jamás se desgrasa, por lo que si vemos que hay un exceso de textura lipídica sobre ella, tendremos un compango de dudosa calidad.
Faba de calidad, reposo y compangos llenos de sabor. Elaborar una auténtica fabada asturiana como las de antaño es más fácil de lo que imaginamos, siempre que utilicemos los mejores ingredientes y respetemos los tiempos de elaboración de un plato que es garantía de sabor y calidad.